Al transcurrir del tiempo cada vez son más las personas que optan por consumir relajantes musculares ¿cuál es la finalidad? Simple, con la intensión de aliviar malestares desagradables como podrían ser. El estrés, tensión y dolores musculares de cualquier tipo. Sin embargo, el uso de estos fármacos suele ser costoso, no a nivel económico sino más bien a nivel de salud.
Los relajantes musculares no son más que un grupo selectivo de fármacos bajo suscripción médica, cuyo consumo causa el relajamiento algo prolongado de los músculos del paciente. Requiera de su aplicación bajo supervisión médica. Por lo que automedicarse con alguno de estos fármacos puede causar muchos riesgos para tu salud.
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¿Para qué se utilizan los relajantes musculares?
Cuando se trata de alguna contractura muscular usualmente se usa este tipo de fármacos en dosis pequeñas para aliviar el dolor y la contracción. ¿Por qué? Simple, porque a la hora de una contractura muscular o dolor de espalda se activan unos tipos de nervios que son los protagonistas a la hora de controlar los músculos. ¿Qué sucede con estos nervios? Sucede que, al activarse, liberan unas sustancias que se adhieren a los receptores del musculo provocando que la contractura se mantenga. Es aquí donde los relajantes musculares hacen su trabajo para evitar que alguna contractura muscular se prolongue en el paciente.
Los relajantes musculares no son un juego
Los relajantes musculares son fármacos que no deben ser administrados de forma continua y sin supervisión de un médico profesional en el área. De forma contraria estas drogas podrían causar diversos daños para tu organismo de forma momentánea o en el peor de los casos de manera permanente. Aunque su nombre sea relajante muscular, este afecta directamente al cerebro y a la medula espinal. Aquí te estaremos advirtiendo sobre algunos de los riesgos potenciales al consumir de forma indebida estos fármacos.
- Afectan tu sistema nervioso: como lo mencionamos anteriormente, estos fármacos no solo atacan a los nervios del musculo, también al cerebro y a la medula espinal
- Producen ronquidos de noche: Si, aunque suene un síntoma leve, al tomar cualquiera de estos fármacos el cuerpo se relajará en su totalidad incluyendo la zona afectada por alguna contracción. Aquellos músculos que están localizados en el cuello tienden a reducir su tamaño
- Son altamente responsables de causar síntomas neurológicos en el cuerpo, entre estos síntomas se pueden encontrar: los mareos, vómitos
- Pueden resultar adictivos: Muchos expertos confirman que estos fármacos son considerados una droga bajo supervisión médica debido a que llegan a ser altamente adictivos
Tiene efectos segundarios a largo plazo llegan a ser motivo de preocupación para la salud del consumidor de estos medicamentos, ya que pueden limitar considerablemente la capacidad de pensar y reaccionar. Causa no solo relajación al tejido muscular afectado, sino que además produce el mismo efecto en todo tu cuerpo en general.
Si estos síntomas te parecieron leves, tenemos la responsabilidad de decirte que no lo son del todo porque estos pueden venir acompañados de otras afectaciones. Más graves como lo es la descoordinación de los brazos, perdida de reflejos, visión borrosa, confusión y muchas más. Esto tiene como consecuencia que los tejidos blandos de la garganta vibren a causa de que, al respirar, el aire pase con dificultad traduciéndose en ronquidos
Indicaciones
Se recomienda usar los relajantes musculares como opción para tratar algún problema muscular cuando este sea un caso donde el dolor sea muy fuerte. Se recomienda su uso en los casos de: crisis agudas o cuando sean los casos de dolores crónicos.
Evitarse a toda costa ser usados, en pacientes de la tercera edad con arritmias, insuficiencia cardíaca o infarto de miocardio reciente, trastornos de la conducción cardíaca, que consumen alcohol, pacientes con enfermedades del ánimo, que manejen maquinarias o vehículos y sobre todo ser aplicado en mujeres embarazadas.
Tipos de relajantes
Para hablar de los tipos de relajantes musculares que existen debemos conocer las opiniones de expertos de la Escuela de Química y Farmacia de la Universidad Andrés Bello, explican que existen dos grandes grupos de estos poderosos fármacos. El primer grupo se conforma con agentes que son empleados por anestesiólogos en procedimientos quirúrgicos y en algunas unidades especiales de cuidados intensivos.
Sin embargo, el segundo grupo de los relajantes musculares son de venta al público, y más que un relajante muscular funciona atacando directamente el sistema nervioso central del cuerpo, para disimular o disminuir el tono muscular generando a su vez una sensación de alivio y disminución parcial del dolor en la zona afectada y en todo el cuerpo en general.
Ahora bien, su presentación a la venta al público suele ser muy variada, por lo que se puede conseguir con nombres comerciales como: Adalgur, trankimazur, yurelax, robaxisal, dolocatil, paroxetina y diazepam. Pueden llegar en presentaciones diferentes, sin embargo, los riesgos e indicaciones vendrían siendo las mismas para cada una de ellas.
¿Por qué llegan a ser adictivos?
Uno de los grandes problemas para salud publica podrían ser aquellos medicamentos cuya venta suele ser legal de manera recetada. Se utilizan para tratar casos como trastorno de sueño, dolores musculares, ansiedad, entre otras enfermedades o lesiones. Sin embargo, bajo manos equivocadas pueden ser utilizadas para usos recreativos y los relajantes musculares no son la excepción.
En países como lo son Estados Unidos, usan estos medicamentos, para consumirlos en forma de drogas ilegales con el uso excesivo de los mismos. En el caso de los relajantes musculares, son conocidos como sedantes o tranquilizantes idóneos. Esta sustancia sirve para disminuir la actividad cerebral lo que resulta ser placentero para algunas personas adictos a estos medicamentos. Causa a su vez una fuerte dependencia a estos fármacos, que de no ser tratado a tiempo puede causar severas consecuencias a la salud consumidor.
Algunos de los relajantes musculares más utilizados para estos fines son: El diazepam, el cual se dispensa en comprimidos y se recomienda utilizar como mucho 15 días. Por el otro lado, tenemos el Lorazepan, el cual se prescribe en capsular para ser administrados a personas mayores.